QUÉ ESPERAR DE UNA EXTRACCIÓN DENTAL

Muchos adultos temen sus visitas al dentista, algo que es completamente comprensible. En la clínica dental abundan los instrumentos punzantes y ruidosos, entre las que destaca el taladro de alta velocidad. No sólo eso, sino que la mayoría no entiende por qué necesitan una extracción dental u otro tratamiento, por lo que retrasan sus visitas al dentista demasiado tiempo.

Una extracción dental es uno de los procedimientos más comunes, así como uno de los más temidos. Sin embargo, si tienes un diente roto, agrietado, cariado o con un absceso, puede ser tu única opción. Por lo general, las extracciones se realizan sólo cuando no hay posibilidad de salvar el diente. Salvar un diente es siempre la primera opción del dentista, pero a veces simplemente no es posible.

El procedimiento de extracción de un diente comenzará con una radiografía para que el dentista pueda planificar el mejor método de extracción y estar al tanto de cualquier complicación que pueda surgir. Hablarán de tu historial médico y querrán saber todos los medicamentos que tomas actualmente, tanto los recetados como aquellos comerciables sin receta. También discutirán contigo sobre el mejor método de sedación para tu caso concreto.

Si desarrollas un resfriado o congestión nasal, náuseas o vómitos la semana anterior al procedimiento, asegúrate de notificar a tu dentista de este suceso, para poder reprogramar la intervención.

Antes de la extracción de un diente

Además de los medicamentos y suplementos que tomas, tu dentista querrá saber detalles sobre lo siguiente:

• Cualquier prótesis articular como la cadera o la rodilla.
• Endocarditis bacteriana.
• Defecto cardíaco congénito.
• Sistema inmunológico comprometido.
• Cirrosis hepática.
• Válvulas cardíacas artificiales o dañadas.

Esto es necesario y normal, así que no te alarmes al enseñarle tu historial médico a tu dentista.

Tipos de extracción dental

Existen dos tipos de extracciones dentales: la simple y la quirúrgica.

Una extracción simple se realiza cuando un diente es visible pero no se puede salvar. Una extracción quirúrgica se usa para los dientes impactados o aquellos que no han erupcionado completamente. Ambos tipos requieren de anestesia local, pero una extracción quirúrgica puede necesitar también anestesia intravenosa. No deberías sentir ningún dolor durante el procedimiento, aunque si puedes notar algo de presión. Si sientes dolor o pellizcos, informa a tu dentista inmediatamente.

 

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Cuidados tras una extracción dental

Una vez finalizado el procedimiento, el dentista puede usar unas suturas que se disuelven por sí solas y luego taponar la zona con una gasa. Se te pedirá que muerdas firmemente la gasa y mantengas la presión hasta que deje de sangrar, lo que puede tardar hasta tres horas.

Cuando llegues a casa, tendrás que seguir estas instrucciones de cuidados post-procedimiento:

• Mantén presión sobre la gasa hasta que se detenga la hemorragia, sustituyendo la gasa cuando sea necesario.
• Descansa durante 24 horas y evita las actividades extenuantes.
• Aplica una bolsa de hielo en la parte exterior de la mandíbula donde se realizó la extracción, pero asegúrate de no aplicar hielo directamente.
• Después de 24 horas, enjuágate con una solución de media cucharadita de sal y unos 200 ml de agua tibia.
• Evita beber con pajita, fumar, escupir con fuerza y enjuagarte durante las primeras 24 horas. Mantén la cabeza elevada durante 24 horas, incluso mientras duermes.
• Mantén una buena higiene oral, pero evita el lugar de la extracción.
• Toma los analgésicos que necesites según las indicaciones de tu dentista.
• El sangrado, dolor y la hinchazón son normales en muchos tipos de procedimientos, pero no deberían durar más de cuatro horas. Si lo hacen, ponte en contacto con tu dentista de inmediato.

Si experimentas alguno de estos síntomas, llama a tu dentista urgentemente:

• Dolor en el pecho, tos, dificultar para respirar.
• Escalofríos, fiebre, signos de infección.
• Sangrado, dolor o hinchazón intensos después de cuatro horas.
• Secreción excesiva, enrojecimiento o hinchazón.
• Vómitos o náuseas.

Cualquiera de estos síntomas que acabamos de mencionar pueden indicar que existe una complicación, así que ponte en contacto con tu odontólogo inmediatamente.

Cuando el lugar de la extracción se haya curado, podrás reanudar tu estilo de vida, tu dieta y tus actividades habituales, siempre que la zona de la extracción esté curada por completo. Normalmente, la curación completa se produce en una o dos semanas. Si no se respeta este tiempo, puedes desprender el coágulo y tendrás que empezar la curación desde cero.

Extracción de las muelas del juicio

Las muelas del juicio son el tercer y último grupo de molares que erupcionan. Están situadas en el extremo posterior de la boca, detrás de los demás dientes, y en los maxilares superior e inferior. Aunque muchas veces las muelas del juicio salen rectas y sin afectar a la alineación de los demás dientes, a veces no es así. Salen en ángulo y alteran la alineación de los demás dientes. A veces, no erupcionan en absoluto, lo que provoca una muela impactada. Cuando un molar queda impactado, la única solución es una extracción quirúrgica.

Algunos dentistas prefieren la extracción preventiva de las muelas del juicio para eliminar la posibilidad de que surjan problemas. Otros, sin embargo, prefieren dejar que las muelas del juicio permanezcan mientras no sean problemáticas. Hay argumentos válidos para ambos puntos de vista y hay dentistas de renombre en ambos lados del debate. En última instancia, la elección depende del paciente.

Las muelas del juicio pueden albergar enfermedades de forma asintomática, por lo que la eliminación de las muelas del juicio elimina el potencial de problemas.
Es difícil predecir si las muelas del juicio desarrollarán enfermedades o problemas o cuándo lo harán, por lo que su extracción resuelve el dilema.
La extracción de las muelas del juicio a una edad más temprana elimina las complicaciones de salud que pueden surgir en los adultos mayores cuando se someten a una extracción.

En Clínica Dental Suarez Solís, como dentistas en Avilés, recomendamos seguir todas estas pautas para garantizar una boca sana. Recalcamos las visitas al dentista cada cierto tiempo. Contacta con nosotros y pide cita en Suarez Solís. Tu boca te lo agradecerá.